El holandés Joram Roukes descolla con sus pinturas al óleo de grandes dimensiones que parecen condensar gran parte del arte y la cultura pop de los últimos cien años. Con sus fantásticas pinturas fantasmales de configuración casi surrealista, Roukes va del collage y referencias a íconos pop a chorreados típicos de la escuela del graffiti y el street art, siempre con colores vibrantes y magistralmente plasmados por una técnica apabullante, a los que agrega una corrosiva mirada a la cultura urbana de las sociedades occidentales con un resultado increíble e inquietante que lo destacan en la escena de fine art contemporánea. [Via]
Crossoverism!